La voz de la naturaleza

La aridificación avanza implacable en la mayor parte del planeta. Más de las tres cuartas partes del mundo (77,6%) han sufrido condiciones más secas entre 1990-2020 que en los treinta años anteriores. Y las tierras clasificadas como áridas se han expandido 4,3 millones de km2, lo que equivale a la mitad del tamaño Australia. Detrás está el aumento global de las temperaturas, según certifica por primera vez un organismo científico asociado a la ONU, que asegura que el informe publicado este lunes es un «punto de inflexión».

La población que vive en zonas áridas puede duplicarse de aquí a final de siglo.

«Este análisis finalmente disipa una incertidumbre que ha rodeado por mucho tiempo las tendencias de sequía global», dice Ibrahim Thiaw, secretario ejecutivo de la Convención de las Naciones Unidas de Lucha contra la Desertificación (CLD). «Por primera vez, la crisis de aridez ha sido documentada con claridad científica, revelando una amenaza existencial que afecta a miles de millones de personas en todo el mundo».

Algunas de las plantas de interior con poca luz son begonias, violeta africana, costilla de Adán, cinta, menta, palmera de salón, lengua de tigre, ficus benjamina, cactus de Navidad… Uno de los principales problemas para decorar los hogares es encontrar plantas de interior resistentes con poca luz y que, en general, necesiten pocos cuidados. Por ello, en EcologíaVerde hemos preparado este artículo con 25 plantas de interior que necesitan poca luz para que conozcas algunas de las mejores opciones. ¡Descubre estas plantas de sombra para interior!

Las Begonias con una de las plantas con flores más fáciles de mantener y existe gran variedad de especies.

Begonias

Si estás buscando plantas de interior que necesitan poca luz y con flor, porque no solo quieres verde en ese rincón de tu hogar, sino también flores que lo alegren todavía más, te recomendamos hacerte con una begonia.

La DANA que a finales de octubre azotó el sureste de España fue más intensa por el cambio climático causado por las actividades del hombre. A esa conclusión llegaron dos estudios científicos al cotejar sus características con la información meteorológica histórica de las últimas décadas. Y no es un hecho puntual. Tres de cada cuatro sucesos climáticos extremos se ven exacerbados por el sobrecalentamiento del planeta producto de los gases de efecto invernadero emitidos por la quema de combustibles fósiles. Así lo indica una investigación publicada por Carbon Brief, sitio web especializado en ciencia climática.

Sólo el 9% de los eventos recopilados en el mapa (66) fueron menos probables o severos debido al cambio climático.

Dos científicos de esta organización británica confeccionaron un mapa interactivo que incluye más de 600 estudios de atribución -como se conoce a los informes que buscan averiguar la relación entre el calentamiento global y los eventos meteorológicos- de casi 750 sucesos climáticos extremos ocurridos en todo el planeta durante los últimos veinte años.

Un científico y filosofo murciano ha sacado a relucir un eterno debate acerca de si las plantas tienen o no inteligencia. Su punto de vista que las apreciaciones que se suelen tener al respecto, se hacen desde una perspectiva que abarca a los seres humanos y los animales, pero generalmente ignora a las plantas y al resto de las especies con las que compartimos planeta.

Las plantas también liberan ciertas sustancias en momentos de estrés, una razón más para mantener una mente abierta.

Cuando nos referimos a la inteligencia o a las distintas inteligencias hay que determinar qué entendemos exactamente por este concepto y definir qué seres biológicos pueden mostrar signos de ella. Con esta premisa abrió en 2015 sus puertas el MINT Lab (Laboratorio de Inteligencia Mínima) de la Universidad de Murcia.

Apenas falta un mes para que llegue el invierno, y la observación de las aves que se asoman y se instalan en España en esta época del año concluye que cada vez llegan menos a España.

Es la conclusión que se deriva de la observación de personas voluntarias que participan en el programa de ciencia ciudadana de SEO/BirdLife, a través del programa denominado Sacin.

En España ha habido aproximadamente un 19% de individuos menos en 2023 respecto a 1998 en esta época del año.

La herramienta está activa para conocer el estado de las poblaciones de aves en invierno, por lo que se sabe que en España ha habido aproximadamente un 19% de individuos menos en 2023 respecto a 1998 en esta época del año. El análisis sobre los datos recogidos de más de 80 especies de aves durante 15 temporadas permite llegar a esta conclusión.

Odile Rodríguez de la Fuente es divulgadora científica y medioambiental, y lleva en la sangre el amor a la naturaleza, gracias al entusiasmo y legado de su padre, el prestigioso Félix Rodríguez de la FuenteEntre otros aspectos, ha defendido que para vivir en armonía con la naturaleza, como defendía su padre, debemos «imitar las fórmulas de esa naturaleza porque ésta tiene soluciones y respuestas que sobrepasan nuestra propia imaginación». «Y es que hoy sabemos que la tecnología más avanzada y más barata para mitigar el cambio climático es la naturaleza, así que dejemos que penetre en nuestras ciudades y en nuestras vidas para que nos ayude a sanarnos a nosotros mismos», ha expuesto en su intervención El Hombre y la Tierra, en honor a su padre, en las III Jornadas OKGREEN, celebradas en la Fundación Giner de los Ríos de Madrid.

Hemos perdido alrededor del 60% de especies vertebradas, 50% de invertebrados, 50% de la vida marina.

«Mi padre, ya que le ha puesto en paralelo con Giner de los Ríos, más que un outsider era un insider, ya que era uno de los hombres más conocidos de su tiempo que no utilizó la ciencia o el sentido de pertenencia a la naturaleza para separar. Eso es clave. Si hay algo que es completamente transversal a la vida, con mayúsculas, es que todos compartimos un mismo origen y un mismo destino como especie», ha señalado.

    Incendios, sequía, tala descontrolada, calentamiento global, pérdida de biodiversidad. La lista de problemas y amenazas a las que se enfrenta el planeta es larga y variada. Su impacto aún está por calcular, pero el peligro acecha a más de uno de cada tres árboles que han echado raíces en la Tierra. Al menos 16.425 de las 47.282 especies estudiadas por la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN, por sus siglas en inglés) en su primera Evaluación Global de Árboles están al borde de la extinción.

    La Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza advierte del riesgo para los bosques en islas y trópicos.

    Por primera vez en la historia, la UICN incluye en su lista roja a los árboles, una clasificación que incluye también aves, mamíferos, reptiles y anfibios. En total 166.061 especies amenazadas, de las que, con esta última revisión, los árboles son los que más en riesgo de desaparecer se encuentran.

      La mayor catástrofe de la historia reciente de España ha vuelto a poner encima de la mesa algo de lo que llevan mucho tiempo advirtiendo los científicos: el cambio climático incrementa la virulencia de los desastres naturales. En el caso de la DANA que azotó la semana pasada a la Comunidad Valenciana y otras áreas de la península, los expertos coinciden en señalar el incremento en la temperatura del Mediterráneo como uno de los elementos determinantes, ya que, cuanto más cálidas son las aguas en los océanos, mayor cantidad de humedad está a disposición de las tormentas asociadas a este fenómeno meteorológico extremo.

      El foro ‘Agenda 2030: ante la urgencia de acelerar el cambio’ reunió en Barcelona a expertos y representantes de empresas para analizar el calentamiento global.

      Sin embargo, pese a que existe cada vez más consenso en la necesidad de cambiar el sistema para hacerlo más sostenible medioambientalmente, apostando por la economía circular, respetando la biodiversidad y recorriendo la transición energética de una forma justa, sigue siendo esencial que se haga desde la colaboración entre sectores, con compromiso institucional y contando siempre con las empresas y los ciudadanos.

        Los expertos avisan de un colapso de las corrientes atlánticas que llegará de forma casi inmediata. Uno de los elementos que pueden acabar siendo lo que marque una diferencia importante. El futuro parece que está cada vez más negro, es decir, nos enfrentamos a algunas situaciones que pueden ser las que marquen un antes y un después. Tocará estar pendiente de una serie de elementos que pueden acabar con la realidad tal y como la veamos. Por lo que, habrá llegado ese momento de empezar a pensar en un futuro que no parece nada prometedor.

        Los expertos en el clima están totalmente atentos ante lo que parece que acabará siendo una realidad.

        Al contrario de lo que estaríamos esperando, nos enfrentamos a una serie de cambios que pueden ser los que marquen en un antes y un después. La ciencia parece que está dando respuesta a una serie de incógnitas que son cada vez más importantes. Habrá llegado ese momento en el que tenemos que afrontar determinadas situaciones de inestabilidad. El clima parece que está cambiando y lo hace con la mirada puesta a una serie de fenómenos que los expertos se encarguen de determinar. Por lo que ha llegado el momento de que tengamos claro lo que llegará.

          Las plantas suelen verse como elementos del paisaje, prácticamente carentes de actividad. Sin embargo, recientes avances en la neurobiología vegetal están eliminando esta idea. Cada vez más, los árboles se ven como seres vivos complejos que incluso cuentan con un sistema de comunicación entre ellos.

          La naturaleza esconde algunos misterios que nos sorprenden. Una de las grades preguntas es ¿pueden los árboles comunicarse?

          Los árboles son seres vivos altamente sensibles que se comunican entre sí, se mueven a su manera y apoyan a otras especies en su entorno. A pesar de no tener un sistema nervioso como los animales, parecen ser capaces de transmitir órdenes e impresiones, medir su entorno y aprender de sus experiencias.