La aparición de cucarachas en hogares o locales comerciales puede convertirse en un quebradero de cabeza. Con la llegada del buen tiempo es habitual ver estos insectos, y lo que es peor, que se conviertan en una plaga.
Las autoridades en España aseguran que este año hay un 33% más de infestaciones en comparación con 2023. Su presencia es mayor en municipios costeros y del este peninsular.
Las altas temperaturas pueden estar detrás de cambios genéticos en estos insectos, capaces de resistir los insecticidas.
Según un estudio reciente, la variedad de blattella germanica (cucaracha alemana) ha sufrido mutaciones que hacen que sean más resistentes a los insecticidas, complicando así los métodos habituales para eliminarlas.
El aumento del calor acelera los ciclos metabólicos de las plagas. Esta especie es muy habitual en viviendas y empresas relacionadas con la alimentación.
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